Muchas
personas sufren de hipotensión, que es cuando la sangre circula en cantidades menos adecuadas que
lo ideal. Puede provocar desmayos o mareos.
En
el siguiente artículo encontrarás
los mejores remedios naturales para la presión baja.
¿Qué saber sobre la
hipotensión?
La condición conocida como presión baja puede
provocar los siguientes síntomas:
- Letargo
- Fatiga
- Debilidad
- Náuseas
- desayunos
- Sueño
- Sudoración
- Palidez
¿A qué se debe la hipotensión? Las causas más frecuentes de esta condición son:
- Dieta
deficiente de calorías, vitaminas (sobre todo B y C) y proteínas.
- Bajos niveles de azúcar en sangre (hipoglucemia).
- Hemorragia
interna en los riñones, colon o tracto gastrointestinal.
- Problemas
emocionales como, por ejemplo, la depresión.
- Funcionamiento
incorrecto de la glándula tiroides.
- Consumo de ciertos medicamentos (diuréticos y
antidepresivos).
- Deshidratación.
- Gran
pérdida de sangre.
- Alteraciones
en el corazón (dilatación cardíaca, infección del miocardio o
insuficiencia cardíaca).
Debemos saber que la presión arterial baja del
tipo crónico no suele tener síntomas tan fáciles de distinguir. Los problemas
surgen cuando la presión sanguínea baja repentinamente y provoca la falta de
oxígeno en el cerebro.
Existe otro tipo de hipotensión llamada postural
o ortostática y ocurre cuando cambiamos de posición bruscamente (por
ejemplo, cuando nos levantamos rápido de la cama o de una silla, o nos ponemos
de pie en seguida).
Consejos para evitar y
tratar la hipotensión
Si has sufrido una bajada de la presión
arterial y no deseas que vuelva a ocurrir, procura prestar atención a
estos tips:
Bebe más líquido
Ya que la hipotensión se puede deber a una
deshidratación, ten siempre a mano una botella con agua mineral para no
solo hidratarte, sino también aumentar el volumen de la sangre.
No olvides que si bien beber té o café puede elevar
la presión arterial esa mejora es temporal y hasta puede causar más
deshidratación.
Lleva una dieta equilibrada
Si se te baja la presión con frecuencia, consume
más cantidad de hidratos de carbono en pequeñas porciones, varias veces al día
(cada 2 o 3 horas). Por ejemplo, come:
- Pan
- Pasta
- Arroz
- plantas
- Granos
enteros
- Verduras
- Pescados
- Pollo
magro
- Frutas
Evita cambios de posición muy bruscos
Antes de ponerte de pie, cruza las piernas en forma
de tijeras y aprieta. Otra opción es apoyarte en el respaldo o en otra silla
para ayudarte a levantar. Cuando estés acostado, muévete despacio y
siempre de costado, nunca te levantes haciendo fuerza con los abdominales.
Si estás sentado o inclinado cerca del suelo, levántate por etapas, aunque
tardes más tiempo.
Equilibra el consumo de sal
Los que sufren de presión baja han de aumentar
(levemente) su consumo de sodio, a diferencia de lo que ocurre con los
pacientes de presión alta. Es preciso consultar con el médico para que
indique la dosis adecuada.
Verifica los medicamentos que consumes
Ciertos fármacos para el corazón, así como los
antidepresivos, los tranquilizantes, etc. pueden reducir la presión sanguínea.
Si está indicado en los efectos adversos, pide al médico que te lo cambie
por otro similar.
Realiza ejercicios mentales
Según algunas investigaciones, resolver problemas
matemáticos (restar, sumar, contar, multiplicar, dividir) eleva la presión
sanguínea y puede compensar la hipotensión.
Duerme con la cabeza en alto
La cabecera debe estar a unos 20 o 30 centímetros
elevada en relación a los pies. Puedes colocar más almohadas o unos tacos
en las patas delanteras de la cama.
Remedios naturales para
la presión baja
Además de cumplir con los consejos indicados anteriormente, puedes aprovechar
las bondades de la naturaleza y disfrutar de varias recetas caseras para la
hipotensión:
Té de regaliz
Es un remedio natural para subir la presión.
Ingredientes
- 1
cucharadita de regaliz (5 g)
- 1
taza de agua (250 ml)
Preparación
Calienta el agua y, cuando hierva, echa la
cucharadita de regaliz. Retira del fuego y deja reposar 5 minutos. Cuela y
bebe.
Romero
Tiene la capacidad de estimular el sistema
nervioso central y mejorar la circulación de la sangre. Una opción es
masajear las piernas con unas gotas de aceite esencial de romero mezclado con
unas gotas de aceite de almendras o de oliva. Otra alternativa es preparar un
té.
Ingredientes
- ½ cucharadita
de romero (2,5 g)
- 1
taza de agua hirviendo (250 ml)
Preparación
Deja inficionar durante 10 minutos, filtra, endulza
con miel y bebe.
Cola de león
Esta planta, también denominada agripalma, es muy
buena para evitar la trombosis, mejorar la salud de los capilares sanguíneos y
actuar como tónico cardíaco. A su vez, combate la fatiga y cuida tanto el
sistema cardiovascular como el nervioso. Se puede consumir en infusión
o tintura.
Jengibre
Estimula la circulación, evita que la sangre se
coagule y aumenta la temperatura corporal. Haz una infusión con:
- 1
cucharadita de jengibre rallado (5 g)
- 1
taza de agua caliente (250 ml)
Preparación
Deja que el jengibre se disuelva en la taza de
agua. Bebe de inmediato. Puedes añadir limón o miel.
Ginseng
Es uno de los remedios naturales más versátiles que
existe, se ubica dentro del selecto grupo de los “todo terreno” junto al ajo
por ejemplo. En este caso, ayuda a regular la presión (alta o baja).
Puedes preparar una infusión.
Ingredientes
- 1
cucharadita molida de la raíz de ginseng (5 g)
- 1
taza de agua (250 ml)
Preparación
Pon a calentar el agua y cuando rompa el hervor,
echa el ginseng. Deja reposar 15 minutos, filtra y bebe.
Geranio
Permite regular la presión arterial baja y alta.
Con el aceite esencial de geranio mezclado con aceite de oliva o de
almendras realiza masajes en las piernas. Aprovecha sus otras propiedades:
- Antidepresivo
- Desestresante
- Anticelulítico
- Antiacnéico
- Para
tratar hemorroides
- Para
la gota
- Para
aliviar los síntomas de la menopausia
- Para
la dermatitis
mil gracias por la información , yo padezco de presión baja y no sé porqué seguiré las instrucciones
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